Las explotaciones familiares lideran la sostenibilidad en la ganadería
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de la Región de Murcia (UPA-Murcia) ha valorado muy positivamente los últimos datos del Ministerio de Agricultura, que revelan una importante reducción del 16,7% en las emisiones de amoniaco en las explotaciones ganaderas intensivas entre 2005 y 2023. Un logro que, según la organización, no habría sido posible sin el esfuerzo de las explotaciones familiares, mayoritarias en el sistema productivo español.
Esta bajada en las emisiones es consecuencia directa de la implementación de las Mejores Técnicas Disponibles (MTDs) tanto en el porcino intensivo como en el sector avícola. Estas técnicas abarcan desde mejoras en la alimentación del ganado y las condiciones climáticas de las instalaciones hasta la gestión eficiente de purines y estiércoles. El resultado es un impacto ambiental considerablemente menor y un paso firme hacia una ganadería más sostenible.
Más allá del esfuerzo: una exigencia de reconocimiento
Carlos Esparcia, vicesecretario general y responsable de ganadería de UPA-Murcia, ha subrayado que estos avances “no pueden compensarse únicamente con una palmada en la espalda”, ya que requieren inversiones que aumentan los costes de producción para los ganaderos. Por ello, reclama un reconocimiento real por parte de la sociedad y de las administraciones, que se traduzca también en una mejora en los precios percibidos por los productos ganaderos.
“Estos esfuerzos deben verse reflejados en la rentabilidad de las explotaciones”, ha remarcado Esparcia, señalando que muchas de estas medidas implican una transformación estructural del modelo productivo. Desde la alimentación más precisa hasta la adaptación de infraestructuras, el camino hacia la sostenibilidad no está exento de sacrificios.
ECOGAN, herramienta clave en la medición y reducción de emisiones
UPA-Murcia destaca además el papel del sistema ECOGAN, una aplicación pionera en Europa que permite estimar las emisiones generadas en las granjas. Las declaraciones anuales realizadas por las explotaciones de porcino y avicultura han sido fundamentales para calcular esta reducción del 16,7%, superando ampliamente los requisitos establecidos por la Directiva de Techos Nacionales de Emisión para el periodo 2020-2023.
La organización remarca que España ha conseguido una reducción cinco veces superior a la exigida, algo que refuerza la posición del país en el cumplimiento de los compromisos medioambientales y climáticos adquiridos a nivel europeo e internacional. Según UPA, este éxito debe tomarse como ejemplo de cómo la agricultura familiar puede ser compatible con la sostenibilidad.
UPA-Murcia exige políticas que garanticen la viabilidad del sector
A pesar de los buenos resultados, desde UPA-Murcia se advierte de la necesidad de medidas que garanticen la continuidad de las explotaciones familiares. “Las exigencias legales seguirán aumentando y si no hay un respaldo económico que permita a los ganaderos seguir adaptándose, corremos el riesgo de perder un modelo productivo esencial para el medio rural y para el abastecimiento alimentario”, concluye Esparcia.
UPA-Murcia insiste en que la sostenibilidad debe ir acompañada de políticas públicas coherentes, capaces de valorar el impacto positivo de las explotaciones familiares en el territorio, la economía y el medio ambiente. En este sentido, reclaman precios justos, ayudas a la inversión en sostenibilidad y campañas de sensibilización para que los consumidores entiendan el valor añadido de los productos ganaderos locales y sostenibles.