La campaña 2024/2025 de almendra en España alcanzará una producción total de 373.558 toneladas. Así lo prevé el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que apunta a un incremento del 17,5% respecto a la campaña anterior y un 9,1% por encima de la media de los últimos cinco años.
España se consolida así como el segundo productor mundial de almendra. Además, este cultivo ocupa el 85% de la superficie de frutos secos en el país.
Estas valoraciones fueron realizadas durante la mesa sectorial de frutos secos, presidida por la directora general de Producciones y Mercados Agrarios, Elena Busutil, donde se analizó la situación desigual de este cultivo entre las comunidades autónomas, a pesar de la recuperación general. En este sentido, mientras Aragón y Castilla-La Mancha han reportado aumentos del 38% y 49% respectivamente, otras regiones como la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia han experimentado descensos de producción superiores al 35% debido a la falta de precipitaciones y condiciones climáticas desfavorables.
Datos de comercio y superficie
El análisis de la campaña anterior también revela datos significativos sobre el comercio exterior de almendras. Así, este cultivo representa el 90% del valor total de los frutos secos exportados, alcanzando un balance positivo de 188 millones de euros, que duplica el valor de la campaña anterior y es un 35% superior a la media de los últimos cinco años. Además, las exportaciones de almendras crecieron un 6,3% respecto a la campaña anterior, mientras que las importaciones disminuyeron un 17%.
La Unión Europea sigue siendo uno de los principales destinos de las almendras españolas, acaparando el 23% de la cuota de mercado, solo por detrás de Estados Unidos. Así, las ventas al mercado europeo fueron especialmente positivas, según fuentes ministeriales, con un incremento del 14% en volumen y del 6,7% en valor durante la campaña 2023/2024.
Además, la superficie dedicada a cultivos ecológicos representa un tercio del total plantado en España, siendo el almendro el cultivo más relevante en este ámbito, con un 82% de la superficie ecológica. También se ha destacado el potencial productivo de las plantaciones que aún no han alcanzado la plena producción, con un 15,5% de la superficie de almendras en esta situación.
Elena Busutil puso de relieve la importancia de disponer de datos precisos para que los productores puedan orientar sus decisiones empresariales de manera efectiva. Con la normativa que entrará en vigor el 1 de enero de 2025, que exigirá el etiquetado del país de origen, se abre «una oportunidad única para diferenciar nuestras producciones y trabajar en su valorización», concluyó.