Una de las principales herramientas de las marcas y empresas para generar conocimiento de marca, mejorar la imagen, etc, son los contenidos. Una buena estrategia de Marketing de Contenidos es imprescindible para toda marca que quiera llegar de forma directa a los consumidores. La partida destinada al marketing de contenidos en los presupuestos está creciendo en los últimos tiempos, aunque no hay que olvidar no se trata de un universo perfecto, también hay ciertos problemas.
Como hemos mencionado antes, lo importante es que la estrategia de Marketing de Contenidos sea coherente, y sobre todo, con un contenido interesante y relevante. A continuación señalamos cuatro de los errores más típicos a la hora de diseñar o poner en marcha una estrategia de Marketing de Contenidos:
Contenido irrelevante y poco interesante
Si partimos de una estrategia de Marketing de Contenidos, en la cual el contenido no es bueno, está claro que la estrategia no está bien planteada o ejecutada. Uno de los principales fallos radica en pensar que los directos y los usuarios tienen las mismas expectativas, lo cual es un fallo garrafal. Es importante estar al día de las tendencias y las nuevas demandas de los usuarios, e incluso dependiendo del momento, el contenido que se prefiere es diferente, por lo que deberemos planificar bien la estrategia en términos de contenido y público objetivo.
Contenido a destiempo
Otro de los fallos más típicos es lanzar el contenido sin hacer un estudio previo o una planificación, o incluso ser poco constante en el lanzamiento de ese contenido. Los consumidores buscamos lo que nos interesa, y decidimos nuestro interés en muy pocos segundos, por lo que es importante que al abrir una ventana sobre nuestra marca, el primer mensaje que se transmita al usuario sea lo más relevante posible.
Incoherencia entre el contenido y las vías de lanzamiento de la estrategia de Marketing de Contenidos
Es tan importante el contenido, como el momento de lanzarlo, así como la plataforma que utilizamos para la promoción. Es importante seleccionar las vías a través de las cuales se va a lanzar el contenido, así como el momento de hacerlo. Los usuarios no utilizan un único canal para recibir la información, cada día están más conectados, lo que supone que es posible conectar con ellos a través de varios canales, y en momentos diferentes.
Contenido inconsistente
Es otro error que deriva de los anteriores, ya que una buena planificación de la estrategia probablemente solventaría todos y cada uno de ellos, empezando por el primero. El contenido debe ver la luz en el momento idóneo y en el canal correspondiente, siempre que queramos llegar a los consumidores de una manera directa.