La organización rechaza el documento aprobado por el lobby europeo y defiende el enfoque de la Comisión Europea como respuesta a las movilizaciones del campo
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha manifestado su desacuerdo con el reciente posicionamiento adoptado por el COPA-Cogeca —la principal organización agraria europea— en torno a la revisión de las prácticas comerciales desleales. Según UPA, el documento aprobado por el organismo europeo “descafeína” las propuestas de la Comisión Europea y representa “una oportunidad perdida” para mejorar la posición de los agricultores y ganaderos en la cadena alimentaria.
Un documento “desacertado” que no representa al campo
Desde UPA critican que el texto aprobado por el COPA-Cogeca se aleja de las demandas históricas de los agricultores europeos, muchas de las cuales se pusieron sobre la mesa durante las movilizaciones masivas del sector agrícola en 2024. A su juicio, las medidas que se recogen en dicho documento “van en la dirección contraria”, al proponer mecanismos voluntarios, aceptar excepciones sectoriales y suavizar la obligatoriedad de los contratos escritos.
Uno de los principales puntos de fricción es la postura del COPA-Cogeca respecto a la voluntariedad contractual y a la posibilidad de formalizar acuerdos de manera oral. UPA recuerda que “se han necesitado años de lucha para lograr que los contratos sean obligatorios y por escrito”, y lamenta que se quiera dar marcha atrás en este avance.
Las cooperativas y el registro de contratos, puntos clave
Otro aspecto relevante es la postura del COPA-Cogeca en relación con las cooperativas. El documento propone eximirlas de la obligación de formalizar contratos escritos, incluso si no recogen claramente en sus estatutos la forma de establecer precios, cantidades o plazos de pago. UPA considera que estas excepciones debilitan la transparencia y abren la puerta a prácticas poco claras.
También se cuestiona la idea de no exigir contratos escritos cuando el primer comprador sea una microempresa —de menos de 50 empleados o con una facturación inferior a 10 millones de euros—, precisamente la estructura predominante en el sector.
UPA ha defendido la experiencia española en cuanto al registro de contratos, recalcando que “ninguna cooperativa ha perdido operaciones por el aumento de carga administrativa”, y subrayando que este registro “es una garantía para asegurar el cumplimiento de los plazos de pago”.
Respaldo firme a la Comisión Europea
Frente al posicionamiento del COPA-Cogeca, UPA ha mostrado su apoyo a la propuesta planteada por la Comisión Europea, que responde directamente a las reivindicaciones del sector: precios justos, contratos obligatorios y una mejora real del poder de negociación de los agricultores.
“La alimentación de Europa no puede construirse sobre la debilidad de sus productores”, ha señalado la organización, que insiste en que el verdadero compromiso con el campo pasa por reforzar sus derechos, no debilitarlos. Para UPA, la clave está en avanzar hacia una legislación comunitaria más justa, efectiva y adaptada a la realidad del campo europeo.
