El posicionamiento de tu marca es una parte imprescindible para tu negocio. Tanto es así que la estrategia de posicionamiento que vayas a organizar va a determinar en gran medida las ventas de tus productos y la calidad de tus clientes.
Es casi una obligación la adaptación de la marca al mundo que nos rodea, e identificar qué es lo que más interesa al público objetivo. En base a eso podremos comunicar mejor los servicios que realiza nuestra empresa de una forma efectiva.
Existen diferentes tipos de posicionamiento, y dependiendo de muchos factores como la estrategia de marca, plan de comunicación y en general el marketing que elijamos para nuestros productos, utilizaremos uno u otro. Estos tipos de posicionamiento son los siguientes:
1-Según sus características: debemos basaremos en las propias características técnicas que posea el producto para resaltarlo frente a sus competidores.
2-En base a sus beneficios: uno de los aspectos clave aquí es resaltar el beneficio que ofrece el producto a su cliente. Qué necesidad cubre para el consumidor, y qué beneficios complementarios ayudarán a la fidelización del consumidor sobre el producto.
3-En función de la competencia: podemos resaltar nuestro producto en base a la comparación con otras marcas líderes. Los consumidores tienden a comparar antes de comprar el producto deseado. Para ello existen dos vertientes de este tipo de posicionamiento:
-Líder: es el que posee mejor posicionamiento en la mente del consumidor y el que mejores prestaciones ofrece.
-Seguidor o segunda marca: se presenta como la alternativa del líder o como una marca más económica.
4-En base a la calidad o precio: es una estrategia de posicionamiento que se basa principalmente en la calidad del producto o en función de su precio.
5-Basado en su uso: se tiene en cuenta el uso del producto es decir, como lo utiliza, cuando lo utiliza, donde lo utiliza y para qué lo utiliza.
6-Basada en el consumidor: es el posicionamiento realizado por los propios consumidores, donde cuentan su experiencia con el producto.
7-Según su estilo de vida: este posicionamiento se centra en el estilo de vida del consumidor y en los productos que mejor podrían completar su día. a día.
Si seguimos todas estas guías obtendremos un posicionamiento de nuestro producto mucho mejor, y además conseguiremos que el cliente se sienta mucho más satisfecho a la hora de realizar su compra. Esto es positivo no solamente por el aumento de ventas, sino también por el factor de fidelización que se ve consolidado gracias a una mejora del nivel de calidad tanto del marketing efectuado como de la imagen del producto.