¿Quieres emprender un negocio pero no sabes por dónde empezar? ¿Acabas de embarcarte en un negocio y hay algo que no funciona?
Un elemento clave a la hora de emprender un negocio es obtener una visión general y lo más detalladamente posible de éste y así monetizar la idea de negocio desde una perspectiva clara. Útil para este aspecto es hacer uso del modelo de negocio Canvas diseñado por el suizo Alexander Osterwalder. Este modelo se divide en nueve apartados en los que cada uno analiza diferentes aspectos en un solo golpe de vista.
- Segmentación de mercado: en la que se definen los diferentes grupos de personas para los que estamos creando un valor y servicio. En este apartado debemos agrupar a los clientes que estén bajo las mismas características, describir sus necesidades, obtener la información de ellos que nos pueda ser de utilidad, como por ejemplo su ubicación geográfica.
- Propuesta de valor: en este aspecto es necesario que nos preguntemos qué propuesta de valor estamos entregando a nuestros clientes, si ésta cumple sus necesidades; si estamos ayudando a resolver sus problemas. Los valores que se creen para un segmento determinado de clientes pueden ser cuantitativos o cualitativos y son por ejemplo hacer marca, reducción de coste y riesgo, innovación, precio, diseño, etc. Con este apartado se constituyen las dos partes más importante de cualquier modelo de negocio.
- Canales: seguidamente habría que definir un canal de distribución adecuado para cada uno de los servicios identificados en el paso anterior, esto es, definir la forma en la que la empresa se comunica con el cliente y la entrega de la propuesta de valor. El canal tiene varias etapas entre las que se encuentran: conciencia, evaluación, compra, entrega y servicio post-venta.
- Relación con clientes: en este apartado se evalúa el tipo de relación que podemos estableces y el que ya hemos establecido con cada uno de nuestros segmentos de clientes y se analiza si es un tipo de relación costosa o cómo se integra con el resto de nuestro modelo de negocio.
- Fuente de ingresos: constituye el dinero efectivo de una empresa. En este apartado analizaríamos el valor que nuestros clientes están dispuestos a pagar por nuestro servicio, así como la modalidad de pago o la cantidad que cada fuente de ingresos a los ingresos generales. Igualmente también deberíamos analizar las diferentes formas o posibilidades que nuestro negocio tiene de generar ingresos como suscripciones, licencias o publicidad.
- Actividades clave: en este punto cabría analizar las partes del proceso que son claves para que tu producto tenga el éxito deseado. Para Osterwalder, las actividades clave son las más importantes para que el modelo de negocio funcione. A partir de las actividades de producción, solución de problemas y plataforma o red debemos volver a repasar los canales, la relación con nuestros clientes, o las fuentes de ingresos.
- Recursos clave: según Osterwalder, los recursos clave son aquellos que permiten a una empresa la creación y oferta de una propuesta de valor. Respecto a este punto cabría preguntarse qué recursos (físicos, intelectuales, humanos y financieros) son clave para el éxito de nuestro negocio.
- Socios clave: sería importante para ir finalizando con nuestra estructura de modelo de negocio destacar los socios y proveedores clave así como los recursos que adquirimos a través de éstos; establecer la forma de organización de los socios, etc.
- Estructura de costos: en este apartado evaluamos cuáles son los costos más importantes en nuestro modelo de negocio y conviene que nos preguntemos cuáles son los recursos o actividades más costosos. Para realizar este análisis existen cuatro tipo de costos: costos fijos (son siempre los mismos como sueldos, renta, etc), costo variable (depende de la cantidad de bienes y servicios producidos), economía de escala y economía de alcance.