Los aperitivos sanos y nutritivos continúan intentando hacerse un hueco en el mercado que no conseguirán fácilmente. La razón de ello se encuentra en el hecho de que este producto constituye una categoría del sector alimentario en el que la gratificación continúa siendo algo fundamental para los consumidores.
Quien consume snacks desea hacerlo con todas sus consecuencias; esta afirmación puede resultar arriesgada, y más teniendo en cuenta los últimos informes que señalan una preocupación creciente del consumidor por una alimentación sana, equilibrada y, en ciertos casos, también ecológica. Sin duda puede resultar extraña, pero según la consultora Datamonitor Consumer, los aperitivos nutritivos no acaban de funcionar desde un punto de vista comercial porque no han conseguido desarrollarse alrededor del concepto de nutrición positiva, como sí lo han hecho los cereales.
Cereales vs snacks
Fortificados con vitaminas y minerales, comercializados bajo reclamos comerciales relacionados con beneficios funcionales, etc. Los cereales que se venden como saludables se comercializan mucho mejor que los snacks que intentan reflejar una imagen sana. La causa de este éxito en las ventas no sólo se debe a los ingredientes, sino también a los momentos del día a los que se asocia su consumo (desayuno, cena o merienda).
Gratificación
Según Datamonitor Consumer las firmas especializadas en snaks saludables podrían haberse equivocado al creer que el consumidor estaría dispuesto a renunciar a la gratificación que ofrece la ingesta de este tipo de productos, que no han alcanzado los objetivos comerciales propuestos desde un primer momento.
A pesar de ello, y tal y como señalan diversos informes internacionales, el consumidor actual tiende cada vez más hacia la adquisición de productos saludables y nutritivos. ¿Cuánto tardarán los aperitivos saludables en abrirse paso en el mercado?
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