La Unión Internacional de Enólogos (UIOE) realizó su asamblea general en Milán. Durante su transcurso eligió un nuevo integrante de la copresidencia. El candidato que contó con apoyo unánime fue Santiago Jordi. Ahora, formará parte de la presidencia junto con el francés Serge Dubois y el italiano Riccardo Cotarella. El joven enólogo representa una nueva generación en el mundo del vino.
Importancia de la Unión Internacional de Enólogos
La Unión Internacional de Enólogos fue fundada en 1965. La impulsaron las federaciones de enólogos de Argentina, Chile, España, Francia, Italia y Portugal. Actualmente está integrada por 16 Federaciones.
Tiene como objetivos representar a las asociaciones de enólogos a nivel internacional, defender la categoría profesional en todo el mundo, combatir el uso abusivo del título de enólogo y mantener la cohesión, solidaridad y buenas relaciones entre las distintas asociaciones.
Esta organización coopera con ISO, la prestigiosa asociación creadora de normas de calidad. También colaboran en aspectos técnicos con la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) a través de la Comisión de Enología.
Otros españoles se incorporaron también en este acto al comité directivo. Son Luis Buitrón, actual presidente de la Federación Española de Enología (FEE), y su tesorera, Begoña Jovellar. Ambos asumirán responsabilidades en las áreas de concursos y de relaciones estratégicas externas, respectivamente.
El flamante copresidente expresó que considera “un privilegio representar a todos los enólogos del mundo, pero también una enorme responsabilidad” . De hecho, en estos momentos la profesión de enólogo presenta grandes desafíos, «desde la reivindicación de la formación superior para frenar el intrusismo a la promoción de una labor de investigación continua”.
Entre sus objetivos están “modernizar la estructura de la institución, aumentar el número de países miembros y abrir la federación a todos los profesionales con cualificación académica reglada relacionada con la elaboración de vino”. Desde este punto de vista, propone integrar enólogos, técnicos, capataces enológicos y técnicos en viticultura.
Santiago Jordi, representante de una nueva generación en el mundo del vino
El nuevo copresidente de la Unión Internacional de Enólogos es Santiago Jordi, enólogo y viticultor. Nacido en Jerez de la Frontera en 1977, a los 20 años comenzó a experimentar en la finca familiar convirtiéndose en pionero del cultivo y elaboración de tintos en la región.
Se asoció al colectivo regional en 2008 y al año siguiente ganó el concurso anual Cata a Ciegas de la Asociación Andaluza de Enólogos.
Se convirtió en presidente de esa asociación en 2010. En 2012 le tocó presidir la Federación Española de Asociaciones de Enólogos, con gran respaldo por su gestión del colectivo institucional, representando el relevo generacional.
Dejó este cargo precisamente para asumir la copresidencia de la Unión Internacional de Enólogos, de la que fue vicepresidente durante los últimos seis años.
Además, Santiago Jordi es un creador de vinos. Es dueño de una bodega que produce vinos exclusivos, en cantidad limitada, dentro de una filosofía que otorga el máximo protagonismo a la potencial anarquía del producto final.
Estos vinos se elaboran en uno de los territorios más singulares del mundo del vino en España. En breve presentará una revolucionaria colección de vinos de pasto y de añada procedentes de viejos viñedos diseminados por el Marco de Jerez.
Todo ello lo compatibiliza con la dirección técnica de Huerta de Albalá (Arcos de la Frontera) y con diversos proyectos de consultoría por toda España y a nivel internacional.
Vinespaña, sede de la próxima reunión de la Unión Internacional de Enólogos en España
La próxima reunión del Comité Ejecutivo de la Unión Internacional de Enólogos se realizará en España. Más precisamente, en Galicia, en abril de 2022, en coincidencia con Vinespaña. Este es el concurso oficial de vinos de la Federación Española de Enología.
El objetivo de los Concursos Nacionales de Vinos VINESPAÑA es premiar la producción de vinos de gran calidad y favorecer su conocimiento entre los consumidores. También, destacar los vinos premiados y la riqueza vinícola de España. De esta manera, contribuye a la expansión de la cultura del vino y al progreso del sector, fomentando el conocimiento vinícola. Al mismo tiempo que se refuerza el prestigio y la confianza en los concursos de esta categoría.
Premia distintas categorías de vino, como vinos de aguja, espumosos, ecológicos, tranquilos, vinos de uvas minoritarias, sobremaduras y vinos de licor.
En 2021 participaron más de 500 muestras y 30 catadores. Se realizó en Almendralejo, Extremadura, y fue la tercera edición a partir del éxito de la primera, en 2018.
