La plataforma reclama una norma sólida, transversal y consensuada para garantizar el relevo generacional y la rentabilidad del sector primario
SOS Rural, la plataforma independiente en defensa del mundo rural, ha presentado sus alegaciones al proyecto de Ley de Agricultura Familiar impulsado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), con un mensaje claro: la norma debe devolver la ilusión a los jóvenes y garantizar un campo rentable y sostenible.
Natalia Corbalán, portavoz nacional de SOS Rural, ha advertido de la urgencia de actuar: “Los jóvenes necesitan motivación, que la sociedad dignifique el papel de los agricultores e, imprescindible, rentabilidad económica, para considerar el campo como un medio de vida atractivo”. Según datos del propio sector, casi el 70% de los agricultores en activo estarán jubilados en apenas una década.
Una norma para garantizar el relevo generacional en el sector primario
La Ley de Agricultura Familiar sustituirá a una normativa de hace 30 años y llega en un contexto de envejecimiento del sector: la edad media del agricultor español es de 62 años y cerca de la mitad supera los 65. En palabras de Corbalán, “la nueva norma debe lograr que los jóvenes vean el sector primario como una oportunidad laboral y familiar”, y para ello, necesita “un plan integral que genere certidumbre y estabilidad”.
La plataforma insiste en que esta ley debe contar con el consenso de todos los actores políticos, económicos y sociales —europeos y españoles—, para asegurar su perdurabilidad y eficacia. Además, subrayan la necesidad de implicar a diferentes ministerios, desde Transición Ecológica hasta Sanidad o Ciencia, para construir una normativa robusta, transversal y con visión a largo plazo.
Evitar trabas y reconocer el papel estratégico de agricultores y ganaderos
SOS Rural reclama una ley que no entorpezca la labor del campo. “Nuestro sector primario, sin ataduras, es capaz de competir con cualquier producto de terceros países”, afirma Corbalán. Por ello, consideran esencial eliminar trabas estériles y cargas que dificultan el día a día de agricultores y ganaderos.
También instan a reconocer el papel del sector en la salud de la sociedad. “Comer mejor genera ciudadanos más sanos y un ahorro sanitario que la FAO estima en 8,1 billones de dólares anuales”, recuerda la portavoz.
Protección del suelo agrícola y sostenibilidad basada en ciencia
SOS Rural destaca la necesidad de proteger los suelos agrícolas de la especulación energética. “La producción de alimentos y las energías renovables deben coexistir sin que una tenga poder sobre la otra”, apuntan, al tiempo que reclaman limitar o derogar la Ley de Expropiación Forzosa de 1954.
Además, abogan por una sostenibilidad basada en criterios científicos, no ideológicos, y un mayor uso de la tecnología. También demandan una mejora en la capacitación agraria con la figura del ingeniero agrónomo como acompañamiento técnico clave: “No hay agricultura sin agricultores, ni desarrollo rural sin un sector primario fuerte, libre y respetado”, concluye Corbalán.
