El ministro de Agricultura, Luis Planas, ha defendido este martes la sección para sus políticas de los presupuestos generales del Estado de 2023. Esta queda lista para su votación en el Congreso sin incorporar grandes enmiendas de los grupos parlamentarios.

Luis Planas ha expuesto las cuentas para su Ministerio dentro de los PGE en el Congreso de los Diputados. En un debate en el que se han repetido los mensajes habituales entre Gobierno y oposición en las discusiones en las Cortes sobre el campo.

Los representantes de Ciudadanos y Partido Popular han lamentado, con distintos grados de rotundidad, el rechazo de sus enmiendas.Vox ha sido muy crítico. Por otro lado, Unidas Podemos y el PSOE han criticado precisamente a Vox y a los populares, en defensa del proyecto presupuestario.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) tendrá un presupuesto de 8.970,13 millones de euros, un 0,4 % superior al de 2022. La parte más importante del presupuesto que gestiona el MAPA proviene de los fondos europeos y en el marco de la nueva Política Agraria Común (PAC). Los agricultores y ganaderos van a contar con 5.692 millones; aparte están los fondos de desarrollo rural.

Luis Planas ha valorado el incremento de dotaciones para seguros agrarios, 317,7 millones en 2023, lo que supone un incremento del 23 % respecto a 2022. También la asignación para regadíos e infraestructuras (412 millones de los que 270 proceden del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia).

El Gobierno asignará también 21 millones para ayudas complementarias dentro del marco del Programa de Opciones Específicas por la Lejanía y la Insularidad de Canarias (Poseican), frente a los 18 millones que aportó en 2021. Esto eleva hasta 289,4 millones la dotación de dicho programa destinado a Canarias.

Para la pesca, los PGE prevén 101 millones y un incremento del 24 % anual.

Ana Oramas (Coalición Canaria, Grupo Mixto) ha valorado el acuerdo sobre PGE por partidas que «duplican la ficha financiera para el plátano» y favorecen precios de los fletes que afectan a otros alimentos.

El montante de los PGE para agricultura, pesca y alimentación es «adecuado» para el momento actual que atraviesa el sector agroalimentario, y para retos como la digitalización, el relevo generacional o la lucha contra el cambio climático, según ha sentenciado el ministro.

Milagros Marcos (PP) ha lamentado que los PGE sean los del «no es no para los agricultores, ganaderos y pescadores» y ha criticado que hayan sido rechazadas enmiendas encaminadas a bonificar los piensos, reducir la factura de la energía o a soportar los costes de producción.

Unos PGE agrícolas «raquíticos e inútiles», a juicio de Ricardo Chamorro (Vox).

Mari Carmen Martínez Granados (Ciudadanos), en tono más moderado, ha lamentado que no hayan salido adelante enmiendas vinculadas al I+D para el sureste español. También ha hablado de los fitosaniarios o a la colaboración con países como Bolivia para la contratación en origen de jornaleros.

Concepció Cañadell ha lamentado que no hayan prosperado enmiendas vinculadas a modernización de riegos catalanes, como los de Urgell o Segarra Garrigues. Si bien ha dicho que quedan algunas «enmiendas vivas» para la votación. Desde Unidas Podemos, Isabel Franco ha calificado los PGE como la mayor inversión en agricultura de los últimos años. Por otro lado, Juan Francisco Serrano (PSOE) ha pedido a los grupos que «arrimen el hombro» en favor del campo y de estas cuentas.