El día de ayer el Gobierno ofreció el nuevo Plan Presupuestario. En dicho plan se han incluido una serie de cambios en algunos impuestos, uno de ellos la subida del IVA de las bebidas azucaradas y edulcoradas del 10% al 21%. Ante este hecho la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), se ha opuesto, por lo que considera una medida “injusta y discriminatoria”.

Según la propia FIAB, opina que la subida del impuesto solamente conseguirá recaudar dinero proveniente de las rentas más desfavorecidas, entre las que se encuentran los más golpeados por la pandemia.

En palabras del director general de FIAB, Mauricio García de Quevedo, que esta acción hará caer el consumo, afectando una vez más al sector hostelero que está sufriendo duramente las consecuencias de la pandemia.

Mientras que por un lado el Gobierno afirma que el principal objetivo de esta medida es perseguir un consumo más saludable de las personas, por otro lado, el director general de FIAB que estas medidas no producirán estos cambios que esperan, ya que la obesidad y el sobrepeso tiene otros factores.

Una vez estos cambios se establezcan solo quedará esperar para comprobar si ha conseguido reducir el consumo de ciertos productos perjudiciales, en favor de otros más sanos o, por el contrario, como afirma FIAB, solo habrán conseguido una mayor recaudación.