La inflación y los precios disparados están afectando de lleno a las economías domésticas. Esto está provocando una merma en la calidad de vida de los consumidores que cada vez más se ven abocados a modificar sus hábitos de consumo.
Según la última encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sobre este asunto, el 90 por ciento de los consumidores han cambiado sus hábitos alimentarios para hacer frente a la subida de los precios de la cesta de la compra. Ahora priorizan más los productos de oferta o las marcas blancas.
La encuesta de la OCU ha sido realizada en colaboración con otras tres asociaciones europeas de consumidores a 5.268 personas (1.307 residentes en España) de entre 25 y 74 años.
En España han crecido los hogares con dificultades financieras
Este estudio, revela también que ha crecido en España el número de hogares con dificultades financieras. Que ha pasado del 23 al 35 por ciento en los últimos ocho meses.
Desde el pasado mes de diciembre, la mayoría de las familias se han visto obligadas a tirar de sus ahorros. Pedir dinero a familiares y amigos o solicitar un préstamo al banco para llegar a final de mes.
Priorizan los productos de oferta y reducen frescos como la carne, el pescado, las frutas o las verduras
Si hablamos de hábitos alimentarios, nueve de cada diez consumidores encuestados los ha cambiado. Y priorizan más los productos de oferta y reducen los productos frescos como la carne y el pescado (32 %). Pero también las frutas y verduras (18 %).
Se incrementa el consumo de los alimentos envasados y congelados en un 28 %.
La inflación promueve nuevos hábitos de consumo en nueve de cada diez hogares
El estudio también pone de manifiesto que la inflación está promoviendo nuevos hábitos de consumo domésticos en el ámbito de la energía. En nueve de cada diez hogares.
El más común, apagar la luz cada vez que se sale de una estancia (72 % de los encuestados). Reducir las horas de calefacción (63 %). Desenchufar el cargador del móvil o de la tablet después de que se usen (59 %). O acortar la duración de la ducha o darle preferencia frente al baño (51 %).
La OCU pide ayudas para los consumidores más vulnerables como la aplicación del IVA al 0 % en la carne y pescado
Entre los nuevos hábitos de ahorro se encontrarían reducir el gasto en ocio y hostelería (87 %). En ropa y complementos (84 %) y viajes (84 %). En actividades culturales (80 %). Y en el uso del coche (74 %).
También en el presupuesto doméstico para prácticas deportivas (60 %). Formación (45 %) y atención sanitaria (41 %). En concreto ir al dentista, al fisio o a las consultas y pruebas diagnósticas.
La OCU, tras estos últimos datos, en los que se expone que el 90 por ciento de los consumidores han cambiado sus hábitos alimentarios para hacer frente a la subida de los precios, pide al Gobierno un incremento urgente de las ayudas a los consumidores más vulnerables. Así como la aplicación del IVA del 0 por ciento a la carne y el pescado.
