No hay nada que atraiga más a los consumidores que un secreto. Aunque no sean nuevos menús, al situarlos como un secreto y ocultos atraerán la atención de los futuros comensales y subirán la afluencia hacia el local. Estas son las conclusiones que han sacado durante los últimos años varios expertos en medios sociales y restaurantes que investigan la experiencia del público en los locales y realiza las pertinentes campañas virales.

Las marcas de comida rápida se están dando cuenta de que hoy en día tener un menú secreto puede ofrecer a los huéspedes una experiencia divertida y única por la que valdría la pena volverá al restaurantes. A las empresas también les encanta tener secretos y a los consumidores también: Ya sea un ingrediente secreto de uno plato tradicional, un toque especiado que nadie conoce o un producto nuevo que es una sorpresa.

Máximo rendimiento

Este sistema provoca que el consumidor se sienta atraído hacia ese producto en cuestión y quiera descubrir el secreto de la marca. No hay que olvidar que la novedad y la sorpresa son dos elementos muy importantes para atraer a nuevas personas a los locales y provocar una buena reputación.

Un ejemplo de estos ejemplos es el del local norteamericano Boloco, que cuenta con su producto Flaming César como uno de los principales. Durante el pasado año esta empresa pudo una oferta limitada de este producto con varios elementos secretos a través de sus contactos en redes sociales, lo que alentaba a los consumidores a descubrirlo por sí mismo.

A veces no es aconsejable facilitar a los consumidores que se ha creado un menú secreto, a veces es mucho mejor dejar que los consumidores sean los que se monten su propia ‘película’ y hagan labores de buzz marketing, de esta manera el local tendrá muchos beneficios sin tener que aportar gasto alguno. Una idea muy sencilla de poner en práctica y que puede atraer a un gran número de comensales.